En mitad del océano Pacífico, justo en lugar en el que debería latir un pulso de algas y corales, crece un tumor de plástico del tamaño de todo un continente, al que la humanidad -única responsable de su existencia- no intenta poner freno. Reconozco que yo, humana entre humanos, nunca había oído hablar de este llamado Vórtice de Basura al que (como a tantas otras cosas en mi vida) me he asomado por primera vez gracias al arte.
El lunes pasado asistí a la inauguración de la exposición "Vórtices" de Daniel Canogar, organizada por la Fundación Canal en su sala de la Plaza de Castilla. Más allá de la reflexión ecologista que, según rezaban tanto las cartelas como los folletos informativos, fue el punto de partida de la serie que ahora se presenta en Madrid, y que me ha dado mucho que pensar estos últimos días, las obras expuestas me devolvieron al mejor arte contemporáneo, a ese que, bien ligado a su tiempo -ya lo decían los artistas de la Secessión vienesa: "A cada tiempo su arte y al arte su libertad"- combina el concepto, la técnica y la estética en las dosis perfectas.
Desde que conocí su obra por primera vez, cuando yo daba mis primeros pasos en la crítica de arte, este artista de casta cuyo apellido es sinónimo de arte -su padre, Rafael Canogar, es uno de los artistas del Grupo El Paso que introdujeron el abstracto en españa, y su hermano Diego Canogar es escultor-, captó mi interés y, poco a poco, también mi entusiasmo. Obras como Palimsesto o sus distintas versiones de Pneuma, así como muchas otras cuyos títulos no soy capaz de recordar, se me antojan poéticas, frágiles y musicales, con una armonía interior que se refuerza en su condición de obras efímeras pues, como vídeo-instalaciones que son, una vez desmontadas pierden su condición de obra completa y, cuando se las reconstruye, nunca vuelven a ser la misma obra.
Pero, voy a volver a "Vórtices". Abre la muestra el gran mural fotográfico que le da título -el que encabeza este post- de casi tres metros y medio de alto por unos seis y medio de ancho, y tras él nos espera otra fotografía, montada esta vez en caja de luz, que profundiza en el mismo tema: la basura como rastro que la humanidad deja a su paso y que infecta el agua que debería ser fuente de vida. A continuación se oye rumor de agua: es el rumor que fluye de Caudal, la instalación que más gusta a la infancia y acapara miradas, comentarios y flashes fotográficos: en una revisión de la clásica Fountain de Marcel Duchamp (1917) , Canogar ha ensamblado varias piezas de baño recogidas de un punto limpio de la ciudad formando una fuente por la que fluye agua real y, flotando en ella, la imagen en miniatura de hombres, mujeres, niños y niñas que tratan de nadar y resistirte al torbellino de los sumideros para ser implacablemente absorbidos por las cañerías.
De las tres instalaciones restantes -Presión, Deriva y Tajo-, es esta última la que más me gustó. 180 botellas de distintos tamaños recogidas también de un basurero y suspendidas entre el techo y el suelo de la sala en ordenado muro de plástico y de agua, sobre el que casi una veintena de proyectores volcaban su luminosidad de gráficos, siluetas y colores. Todo un baile de sombras sugerente y melódico cuyo origen se encuentra en algo tan prosáico como el consumo de agua reflejado en las estadísticas de la Confederación Hidrográfica del Tajo sobre el consumo de agua en Madrid durante los últimos 180 días.
Belleza en la basura, en el consumo, en el agua...
Arte conceptual, efímero montaje de luces y de sombras cuyo reparto incluye decenas de personas que flotan aferradas a envases que no han sido reciclados, como glóbulos rojos en la sangre oxidada de los ríos.
Lugar: Fundación Canal
Dirección: Mateo Inurria, 2, Madrid
Tipo de exposición: Multimedia
Comisario: George Stolz.
Fechas: 08/02/2011 - 10/04/2011
Horario: laborables y fest., de 11 a 20 h. Miérc. de 11 a 15 h. Días 24 y 31 de dic. hasta las 15 h. Días 25 de dic. y 1 de enero. cerr.
Entrada gratuita.
Las fotos de este post, salvo la primera, están tomadas de Arteenlared y están firmadas por Ignacio Hernando.
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